La India es un viaje personal hacia tus
experiencias, tus limitaciones, hacia tu yo
interior. Ningún otro país en el mundo te saca de tus cómodos prejuicios de
comparar y criticar a los demás sin que te salpique.
Cuando llegué a la India después de haber
estado en el país vecino (Nepal), iba
ya con el lema de “yo solo sé que no sé nada”. Solo con esta premisa y dejando
a un lado todo los conceptos aprendidos podía tener la ilusión de acercarme
aunque fuera un poquito a conocer esta cultura misteriosa e imán de religiones.
Es la segunda vez que visitaba este país y en la primera ocasión no me permití
conocer más allá de donde mis ojos me dejaban ver.
Cuando hablamos de una India misteriosa, nos
referimos a todas aquellas cosas que desconocemos de su cultura, que nos
resultan tan diferentes y ajenas a nuestras costumbres, que nos hacen vibrar en
otra sintonía a la que estamos acostumbrados. Esta cultura nos revela una forma de vida
donde la espiritualidad es una necesidad primaria y se muestra como lo más
cotidiano de los quehaceres diarios. Una vida donde el mandato divino, los
avatares de la naturaleza, la suerte y la desdicha forman parte de un círculo
infinito de vidas.
El amor en pareja y sus consecuencias,
por poner uno de los miles de ejemplos, tienen más que ver con la astrología y
el signo de tu dicha que con sentimientos terrenales y cuantificables. Su forma
de proceder se torna ilógica a nuestro parecer y es que, como ya decía la
primera vez que visité este país, muchas veces crees estar en el mundo al
revés.
El hinduismo, los budistas, los jainíes,
el zoroastrismo, el sijismo, el islamismo, el cristianismo, unidos a casi los
mil grupos étnicos reconocidos, a la diversidad de lenguas y dialectos y de
grupos identitarios (como los hijras
-eunucos), componen una amalgama de conocimientos, riqueza y creatividad
desbordante, un mundo tricolor donde los sentidos no descansan y los matices
son la norma.
AGRA
Cuando India estaba bajo el dominio del Imperio
mongol, se revitalizó su cultura con aires frescos del norte. Las artes y las
letras se vieron muy impulsadas bajo este imperio. El tercer monarca de esta dinastía, Shah Jahan, mandó a construir un
mausoleo para su tercera mujer, que falleció cuando se proponía darle su decimocuarto
hijo. Se dice que quedó consternado y que quiso rendir tributos a su amor
realizando esta preciosidad arquitectónica.
Muchos aconsejan visitar el Taj Mahal en
las horas menos concurridas, muy temprano. Nosotros recomendamos justo lo
contrario, ir cuando hay mucha gente porque el escenario es de una belleza
inigualable: de fondo, el mausoleo blanco, inmaculado, que parece que le acaban
de sacar brillo para que tú lo veas; y alrededor, cordones humanos de indios/as que
lo rodean para poder entrar dentro del corazón de la princesa.
El marco es muy fotogénico. Existe un
armonioso contraste entre el blanco del edificio y los llamativos colores de
los trajes indios y sus rostros oscuros y los adornos dorados que prenden de
sus cuellos y envuelven sus brazos. Es un indicativo de saberse que
efectivamente este mausoleo está en la India, y ver este templo sin gente sería
como una noche sin estrellas.
Las miles de princesas ataviadas con sus
saris y sus mejores joyas para visitar a su homóloga no tienen desperdicio. Cuando
entras no ves nada que te satisfaga más que lo que ya has visto antes y deseas
salir para seguir en sus jardines,
observando de lejos, de cerca, de lado, en los soportales, la India ordenada y
majestuosa que dicta mucho de la que se verá fuera.
Qué maravilla de fotos y qué ganas entran de visitar todos esos lugares
ResponderEliminarPreciosas fotos y bonitas palabras...No conozco aun ese lugar, pero lo leído es justo lo que me evoca este
ResponderEliminarespiritual país... CHUS
Maravilloso chicos. Love, love, love.
ResponderEliminarNo te da na !!! Nosotras aquí metías currando y tu por esas tierras disfrutando como un enano...anda sigue coleccionando experiencias que ya trabajamos nosotras...Un beso desde la UCIP Granada
ResponderEliminarGracias, Chío, Krikri y Chus.. Sí, India es uno de los países más increíbles en los que hemos estado. Es algo único, indescriptible a través de palabras y fotos, a pesar de nuestros esfuerzos. Hay que venir para sentirla, vivirta y envolverte en ese aura mágica que tiene,,, Un besazo
ResponderEliminarMuchos besos a mi UCIP de Granada querida. Aunque no os lo creáis, me acuerdo muchíiiiiiisimo de vosotras! Y...me parece bien el trato, jeje... Nos seguiremos contando!!! Un beso enorme...!!!
Hola Chus, que alegria que nos lea. ¿que tal todo?... Espero que bien... Muchos besos.
ResponderEliminarChio te esperamos este verano.... asi que ve preparando la maletas y por lo demas no te preocupes.
ResponderEliminar